El visitante del año: Porsche 906
Diego Speratti - 04/12/2009Entramos en el último mes del año; es hora de empezar a destacar lo bueno que tuvo la temporada clásica. Y en esta lista antojadiza de temas lo primero que proponemos celebrar es a los autos que llegaron de visita a Argentina en el 2009.
La presencia de los autos uruguayos en Autoclásica (click aquí), la del MG K3, el Alfa Romeo 1900 Zagato (click aquí), y otros autos chilenos en las Mil Millas, también la del Aston Martin DB2 convertible inglés en Bariloche, las permanentes visitas de aventureros que eligen recorrer la Patagonia en sus clásicos y, apenas la semana pasada, la presencia de dos autos del Museo Porsche en el Festival de esta marca celebrado en el Autódromo de Buenos Aires, estuvieron entre lo más destacable.
Dentro de ese grupo de elite, nuestro favorito fue el Porsche 906 que pisó la calle de boxes, más no llegó a cortar los vientos de Villa Riachuelo pues el diluvio de aquel día y el caprichoso despertar de los seis cilindros alimentados por los dos Weber de triple cuerpo, terminaron por confinarlo a los boxes, bajo techo.
Allí pudimos apreciar y registrar en fotos cada uno de los detalles de este auto sport concebido por Porsche para reemplazar al 904. Como tal, para su desarrollo se trabajó en los talones de Aquiles de aquel vehículo, que había sido lanzado a fines de 1963 y dos temporadas después ya se mostraba obsoleto frente a la competencia.
El proyecto 906 marchó siempre bajo la batuta de Ferdinand Piëch, quien se subió al pedestal y le marcó el ritmo a su equipo apenas los Dino de Ferrari demostraron ser mucho más competitivos y evolucionados técnicamente.
Para empezar el 904 tenía una construcción de chasis tipo escalera con la carrocería abulonada a él, mientras el 906 proponía algo mucho más moderno y ligero: un chasis tubular.
Ahí fue cuando el primer gran problema golpeó a la puerta. Aunque las regulaciones para participar en el campeonato de Sport para la temporada 1966 se habían ablandado, aun así había que construir 50 unidades antes de poder pensar en homologarlo y competir. Porsche encontró temprana solución delegando la tarea de construcción del 906 en la carrocera Weinsberg, mientras dedicaba todos sus esfuerzos en pergeñar y poner a punto el chasis, en la reducción del peso y en como extraerle la mayor rigidez a éste.
El tiempo apremiaba para debutar en la temporada 66 y una vez que consiguieron los objetivos con la estructura, lo más lúcido fue aprovechar algunos componentes mecánicos del 904; nada menos que los conjuntos de suspensión independientes, el delantero en base a unos triángulos superpuestos y el trasero a brazos arrastrados. Los frenos montaban discos ATE-Dunlop en las cuatro ruedas y su líquido hacía el incansable ida y vuelta en un doble circuito.
Todo iba viento en popa pero quedaba resolver un asunto mayor: el motor. El 904/6 había demostrado que tenía un enorme potencial así que el trabajo sobre el seis cilindros comenzó inmediatamente, con metas claras como conseguir reducir su peso y aumentar su confiabilidad y potencia. Lo primero era una tarea cuanto menos titánica, ya que el motor base utilizaba materiales ligeros como el aluminio.
La solución del equipo de Piëch fue reemplazar el aluminio por otro material aun más liviano: el magnesio. Otras partes fundidas en acero pasaron a fabricarse en titanio.
Así el banco acusó 210 caballos, una cifra impactante teniendo en cuenta que se había partido del motor del 911 de serie que disponía de poco más de la mitad de esa potencia. El torque disponible era de 20 kg-m a 6.000 rpm, la cilindrada se mantenía en los 1.991 c.c., y la caja iba ubicada por detrás del motor, ZF era su autora y le ofrecía cinco cambios al conductor. Con este equipo titular decían que era capaz de alcanzar los 280 km/h de máxima.
Con la competitividad del chasis y el motor aseguradas, la siguiente tarea fue hacer una carrocería acorde. Para ello se eligió la fibra de vidrio como material y al túnel de viento como aliado estratégico. El resultado fue un auto mucho más ancho que su predecesor que le permitía al conductor sentarse más cerca del piso. Y llegó el día de someterlo al pesaje, acusando apenas 580 kilos, algo más que 100 kg por debajo del 904/6.
La carrocería tenía unas cuantas características para destacar: la tapa posterior se abría por completo para trabajar muy cómodo sobre el motor y el eje posterior, y la nariz ocultaba una rueda de repuesto que funcionaba como paragolpes en caso de toques. Detrás de la rueda se ubicaba el radiador de aceite, enfriado a través de la toma ubicada sobre la tapa frontal.
Con apenas 98 cm de altura general, los pasarruedas delanteros, que abrazaban las ruedas de 15 pulgadas, quedaban casi a la altura de la parte superior de la cabina. La tapa del motor sólo dejaba ver las pipetas de los carburadores y por encima de esta se ubicaba un cobertor transparente de plexiglas, que mejoraba la aerodinámica.
En la cabina, dos butacas simples ofrecían regulación longitudinal para adaptarse a las diferentes tallas de los pilotos que compartieran auto en las pruebas de resistencia. El ingreso podía realizarse por ambos laterales mediante unas puertas tipo «alas de gaviota» y la info para los choferes era sumamente simple. Dos instrumentos indicaban la velocidad y la temperatura de aceite, debidamente acompañados por numerosos testigos.
Los nombres 906 y Carrera 6 se fueron adoptando paulatinamente por la compañía luego de estampar ese «906» en el chasis para distinguirlo del anterior 904/6. El nombre encajaba perfecto con la cantidad de cilindros que tenía el modelo más difundido.
El Porsche 906 Carrera 6 hizo su debut oficial en enero de 1966 en las 24 Horas de Daytona. Aquellos carros oficiales fueron pintados en azul Navy y compartieron la grilla de partida con rivales de mucho mayor tamaño y motores más poderosos.
Cuando cayó la bandera a cuadros el 906 resultaba sexto en la clasifica general y primero en su clase.
Luego de haber demostrado su capacidad en esta prueba, las 50 unidades necesarias para su homologación en la categoría de GT hasta 2 litros fueron ordenados por pilotos privados.
Al final no se construyeron todas las unidades necesarias para poder inscribirse a tiempo y participar en aquella categoría en las siguientes fechas, por lo que se mezclaron entre los Prototipos hasta que el requerimiento fue cumplido por la fábrica alemana.
Una vez en la pista, los protos de Ferrari eran más rápidos pero también demostraron flaquezas que los Porsche 906 supieron capitalizar.
En Maranello sólo se habían hecho unos pocos ejemplares mientras los Porsche siempre se inscribían en mayor número. A la vez los 906 estaban más desarrollados antes de llevarlos a las pistas y se mostraban más fiables.
Para fines de abril de 1966, los 50 ejemplares ya estaban terminados y Porsche fue autorizado a participar con ellos en el Grupo 4.
En la Targa Florio, apenas unas semanas después de la definitiva homologación, el Porsche 906 obtendría la victoria en la general con la tripulación Willy Mairesse-Herbert Müller a su mando.
Aquello fue sólo el comienzo de una temporada repleta de éxitos para este auto y, por si fuera poco, los que llevaban adelante su campaña deportiva eran varios equipos privados, por lo cual dentro de la fábrica había tiempo y recursos para seguir desarrollándolo.
Por aquellos años la comunidad automovilística estaba cambiando la alimentación tradicional de los carburadores por la inyección. Porsche comenzó a experimentar con ella con resultados que no eran los esperados. Luego de mucho ensayar y errar, se terminó por concebir un conjunto competitivo. El sistema de Bosch resultó ser el más fiable y, aunque no se conseguía mayor potencia para el seis cilindros, la respuesta al acelerador era mejor y resultaba más sencillo ponerlo a punto respecto a los modelos equipados con los carburadores Weber. En aquel 1966 se hicieron un total de 65 ejemplares a carburador más 9 prototipos equipados con alimentación por inyección mecánica.
Acompañando este nuevo desarrollo de motor, una nueva carrocería estaba lista, con un coeficiente de penetración más bajo. Porsche bautizó a este auto 906E y lo inscribió en la categoría de Prototipos en Le Mans, donde consiguieron el 4º, 5º y 6º puesto detrás de los poderosos Ford GT40. Aunque los 906 no lograron subir al podio fueron capaces de destronar por primera vez a las Ferrari P, equipadas con motores V12.
La evolución continuaría luego con los 906/8 equipados con los bóxer 8 cilindros que siguieron abonando el camino de la marca para convertirse en la reina de las competiciones de resistencia. En 1970, el 917 iniciaría la saga de victorias de Porsche en las 24 Horas de Le Mans.
Klaus Bischof, el amo de llaves del Museo Porsche en Stuttgart y de todo lo que vive allí adentro, presentó este histórico auto sport a los participantes del Festival Porsche y habló de la alta probabilidad de que un Porsche 917 nos visite para la próxima edición de este evento. ¿Será otro Porsche el visitante del año en el 2010?
Fotos: Miguel Tillous y D.S.
Categorías: CrónicasFecha: 04/12/2009
Otras notas que pueden interesarle
Viejos y musculosos
Para los amantes de la masculinidad y la fibra va esta foto que encontré en mi archivo personal tomada en agosto de 2008 en los boxes del circuito de Laguna Seca. Se trata de tres Mustang Boss 302. Eso es todo lo que pude averiguar porque estuve muy ocupado sacándole fotos al Alfa Romeo Tipo […]
Cristián Bertschi07/09/2010 20 Comentarios
892 días, 2 clásicos
En «il più bell’quartiere di Roma», como bien dice Qui-Milano, hay cuantos clásicos populares en «situación de calle». A pocos metros del lugar donde encontré el Citroën 2 CV Spot (click aquí), me encontré con un Renault 4 (con buen telón de fondo…) y un Fiat 500, curiosamente «RHD». Via Luigi Masi, Trastevere, Roma, Italia. […]
Lectores RETROVISIONES04/11/2014 2 Comentarios
635 días, Ford vs Chevrolet 1955
Ford F100 1955 y Chevrolet 3100 1955, San Pedro, Colonia, Uruguay.
Diego Speratti28/10/2012 15 Comentarios
700 días, 700 clásicos
Rambler Custom Hardtop 1956, Ruta 11, Canelones, Canelones, Uruguay.
Diego Speratti20/02/2013 5 Comentarios
El pescau en la Maserati
La semana pasada fui a charlar un rato con Carlos Lostaló. El pescado tiene un sinfín de anécdotas de la época de esplendor de los autos sport y su florecimiento en la Argentina bajo el ala del Club de Automóviles Sport. En la foto se lo ve a Lostaló manejando su Maserati A6GCS Serie 1, […]
Cristián Bertschi16/06/2011 13 Comentarios
Un 504 en el casino de Necochea
Nuestro amigo lector Guilherme Gomes, nos mandó desde Brasil una documento de los más original: Se trata de la presentación en sociedad del Pugeot 504 2000SE en la ciudad de Necochea, allá por agosto de 1976. Nota rara si las hay, las fotos lo son más aún y la historia relatada por uno de los protagonistas en portugués, […]
Lectores RETROVISIONES12/03/2011 19 Comentarios
La servilleta de Albrecht Von Goertz
Comentario por Cristián Bertschi: El 8 de noviembre de 2009 en Retrovisiones publicábamos esta nota de Gustavo Fosco, que formaba parte de una fabulosa discusión entre él, Claudio Scalise, Hernán y yo sobre la paternidad del diseño del Toyota 2000 GT. El intercambio fue apasionado, y las conclusiones anecdóticas, solo quiero revivirla para rescatar y […]
GF29/05/2014 13 Comentarios
¡Mamma mía, un ottoci!
Motor anterior, 4.7 litros, V8, DOHC, 32V, de origen Maserati; chasis Dallara dualframe en aluminio, titanio y fibra de carbono; tracción posterior y puente transaxle; carrocería en fibra de carbono diseñada en el Centro Stile Alfa Romeo por Wolfgang Egger, con recuerdos por aquí y por allá de la Alfa Romeo 33 Stradale. “Instant classic” […]
Qui-Milano10/06/2015 15 Comentarios
Allez les Bleus!
Implacable «tripletta» del equipo Renault en la carrera inaugural de la temporada de rally 1971. Bajo un clima más severo de lo habitual, ese año el Montecarlo fue muy duro, con nieve, granizo, y lluvias dependiendo la altura de la escalada en que se encontraban los participantes. Estas circunstancias potenciaron las cualidades dinámicas de un […]
Hernán Charalambopoulos16/10/2009 1 Comentario
Recuerdos aeroespaciales
El ruido ensordecedor me provocaba pánico y su forma de escualo prehistórico potenciaba esa sensación. Me acuerdo perfecto el sonido rabioso del motorcito que hacía que todo el aluminio de la carrocería produjera una resonancia rarísima y temible. Creo que debe ser uno de mis primeros recuerdos.
Santiago Sanchez Ortega16/11/2010 19 Comentarios
A no desesperar… otra vez
Ya me compliqué la cabeza la primera vez con el MG-F (ver nota aquí). Esta vez, apareció en mi camino este humilde e impecable Austin 7 de 1934. No dí con su dueño ante mi apuro por volver a casa, pero bien pude ver que de acuerdo al distinguido cartel que daba nombre a su […]
Gabriel de Meurville26/08/2010 5 Comentarios
Una 375MM cachuza es más linda
Hace un par de años un amigote inglés, mientras charlábamos de bueyes perdidos en París, metió la mano en un bolsillo, sacó un album de fotos 10 x 15, lo abrió y me dijo: «look». Las medias se me aflojaron, y los cordones de los mocasines se me desataron, era la Ferrari 375 MM de […]
Cristián Bertschi25/08/2010 26 Comentarios
Precio y calidad
Un poco por la crisis, y otro poco porque en realidad es lo que vale un honesto par de Cibiè, en el último salón retro de Barcelona encontramos esta oferta de lo mas tentadora para quienes anden con ganas de personalizar algún artefacto de origen francés.
Hernán Charalambopoulos03/01/2013 4 Comentarios
685 días, 685 clásicos
Chevrolet Cheyenne 1971, Estado de Nueva York, Estados Unidos.
Lectores RETROVISIONES16/01/2013 7 Comentarios
742 días, 742 clásicos
Vauxhall Wyvern LIX, Vieyra y Benavídez y Colón, San José de Mayo, San José, Uruguay.
Diego Speratti08/05/2013 4 Comentarios
360 días, 1 bondi clásico
Bedford línea 12, Urquiza y Libertador, Vicente López, provincia de Buenos Aires, Argentina.
Diego Speratti18/06/2011 6 Comentarios


























Diego Barría
Filipinetti!
Kuve
Igualito al que acaba de correr en Daytona.
Se nota el trabajo que se hizo en la replica.